Marzo 18, 2024
Portada | English Edition | Contáctenos
Biblia
Radio
Sermones
Himnos
Referenecia
Pasatiempos
Información
Sagradas Escrituras Versión Antigua 1569
 
Cap�tulo
 

 
Libros de la Biblia
 
Antiguo Testamento

Génesis | Exodo | Levítico | Números | Deuteronomio | Josué | Jueces | Rut | Primera de Samuel | Segunda de Samuel | Primera de Reyes | Segunda de Reyes | Primera de Crónicas | Segunda de Crónicas | Esdras | Nehemías | Ester | Job | Salmos | Proverbios | Eclesiastés | Cantares | Isaías | Jeremías | Lamentaciones | Ezequiel | Daniel | Oseas | Joel | Amós | Abdías | Jonás | Miqueas | Nahum | Habacuc | Sofonías | Hageo | Zacarías | Malaquías

Nuevo Testamento

Mateo | Marcos | Lucas | Juan | Hechos | Romanos | Primera de Corintios | Segunda de Corintios | Gálatas | Efesios | Filipenses | Colosenses | Primera de Tesalonicenses | Segunda de Tesalonicenses | Primera de Timoteo | Segunda de Timoteo | Tito | Filemón | Hebreos | Santiago | Primera de Pedro | Segunda de Pedro | Primera de Juan | Segunda de Juan | Tercera de Juan | Judas | Apocalipsis

Marcos Capítulo 1

1  
Comienza el Evangelio de Jesús, el Cristo, hijo de Dios.
2  
Como está escrito en Isaías el profeta: He aquí yo envío a mi mensajero delante de tu faz, que apareje tu camino delante de ti.
3  
Voz del que clama en el desierto: Aparejad el camino del Señor; enderezad sus veredas.
4  
Bautizaba Juan en el desierto, y predicaba el bautismo del arrepentimiento para remisión de pecados.
5  
Y salía a él toda la provincia de Judea, y los de Jerusalén; y eran todos, bautizados por él en el río del Jordán, confesando sus pecados.
6  
Y Juan andaba vestido de pelos de camello, y con un cinto de cuero alrededor de sus lomos; y comía langostas y miel silvestre.
7  
Y predicaba, diciendo: Viene tras mí el que es más poderoso que yo, al cual no soy digno de desatar encorvado la correa de sus zapatos.
8  
Yo a la verdad os he bautizado con agua; mas él os bautizará con Espíritu Santo.
9  
Aconteció en aquellos días, que Jesús vino de Nazaret de Galilea, y fue bautizado por Juan en el Jordán.
10  
Y luego, subiendo del agua, vio abrirse los cielos, y al Espíritu como paloma, que descendía (y reposaba) sobre él.
11  
Y hubo una voz de los cielos que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tomo contentamiento.
12  
Y luego el Espíritu Santo le impulsó al desierto.
13  
Y estuvo allí en el desierto cuarenta días (y cuarenta noches) y era tentado de Satanás; y estaba con las fieras; y los ángeles le servían.
14  
Mas después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea, predicando el Evangelio del Reino de Dios,
15  
Y diciendo: El tiempo es cumplido; y el Reino de Dios está cerca: arrepentíos, y creed al Evangelio.
16  
Y pasando junto al mar de Galilea, vio a Simón, y a Andrés su hermano, que echaban la red en el mar; porque eran pescadores.
17  
Y les dijo Jesús: Venid en pos de mí, y haré que seáis pescadores de hombres.
18  
Y luego, dejadas sus redes, le siguieron.
19  
Y pasando de allí un poco más adelante, vio a Jacobo, hijo de Zebedeo, y a Juan su hermano, también ellos en el navío, que aderezaban las redes.
20  
Y luego los llamó; y dejando a su padre Zebedeo en el barco con los jornaleros, fueron en pos de él.
21  
Entraron en Capernaum; y luego los sábados, entrando en la sinagoga, enseñaba.
22  
Y se admiraban de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene potestad, y no como los escribas.
23  
Y había en la sinagoga de ellos un hombre con espíritu inmundo, el cual dio voces,
24  
diciendo: ¡Ah! ¿Qué tienes con nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido a destruirnos? Sé quién eres: el Santo de Dios.
25  
Y Jesús le riñó, diciendo: Enmudece, y sal de él.
26  
Y el espíritu inmundo, sacudiéndolo con violencia, y clamando a gran voz, salió de él.
27  
Y todos se maravillaron, de tal manera que inquirían entre sí, diciendo: ¿Qué es esto? ¿Qué nueva doctrina es ésta, que con potestad aun a los espíritus inmundos manda, y le obedecen?
28  
Vino luego su fama por toda la provincia alrededor de Galilea.
29  
Y luego saliendo de la sinagoga, vinieron a casa de Simón y de Andrés, con Jacobo y Juan.
30  
Y la suegra de Simón estaba acostada con fiebre; y le hablaron luego de ella.
31  
Entonces llegando él, la tomó de su mano y la levantó; y luego la dejó la fiebre, y les servía.
32  
Y cuando fue la tarde, cuando el sol se puso, traían a él todos los que tenían mal, y endemoniados;
33  
y toda la ciudad se juntó a la puerta.
34  
Y sanó a muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y echó fuera muchos demonios; y no dejaba hablar a los demonios porque le conocían.
35  
Levantándose muy de mañana, aún muy de noche, salió y se fue a un lugar desierto, y allí oraba.
36  
Y le siguió Simón, y los que estaban con él;
37  
Y hallándole, le dicen: Todos te buscan.
38  
Y les dice: Vamos a los lugares vecinos, para que predique también allí; porque para esto he venido.
39  
Y predicaba en las sinagogas de ellos en toda Galilea, y echaba fuera los demonios.
40  
Y un leproso vino a él, rogándole; e hincada la rodilla, le dice: Si quieres, puedes limpiarme.
41  
Y Jesús, teniendo misericordia de él, extendió su mano, y le tocó, y le dice: Quiero, sé limpio.
42  
Y así que hubo él hablado, la lepra se fue luego de aquel, y fue limpio.
43  
Entonces le apercibió, y le despidió luego,
44  
y le dice: Mira, no digas a nadie nada; sino ve, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu limpieza lo que Moisés mandó, para testimonio a ellos.
45  
Mas él salido, comenzó a publicarlo mucho, y a divulgar el hecho, de manera que ya Jesús no podía entrar manifiestamente en la ciudad, sino que estaba fuera en los lugares desiertos; y venían a él de todas partes.
Portada  |   Sermones  |   Blog  |   Artículos  |   Himnos  |   Radio  |   Pasatiempos  |   Galería  |   Privacidad  |   Contáctenos
Copyright 2000 - 2024 © iglesiabautista.org. Derechos Reservados.