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La Salvación Del Trino Dios
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Esaú CrespoIntroducción:
El apóstol Pedro envió esta carta a creyentes dispersos en muchos lugares del Imperio Romano, pero particularmente a comunidades cristianas ubicadas cerca del Mar Negro. Todos estos creyentes estaban pasando por grandes persecuciones por causa de la fe en el Señor Jesucristo. El apóstol Pedro tiene la intención de animarlos a permanecer firmes ya que ellos, entre otras bendiciones, han alcanzado la eterna salvación que es obra exclusiva del trino Dios. La doctrina de la Trinidad es una de las más difíciles de entender para la mente humana, sin embargo, la doctrina está presente en la enseñanza bíblica y tenemos que recibirla como revelación de nuestro Dios. La Biblia no enseña que haya tres dioses; la Biblia enseña que hay un solo Dios, pero este Dios existe en tres personas distintas, pero con la misma esencia, con los mismos atributos, pero con diferente función en la salvación del pecador.
En el pasaje citado aprendemos las siguientes enseñanzas:
I. La salvación del trino dios. (v. 2)
- Dios el Padre elige. (v. 2a)
La Biblia claramente enseña la doctrina de la Elección. Esto significa, entres otras cosas, que Dios ha destinado a todos los hombres para salvación. El Señor Jesucristo enseña en Mateo 25:41 que el infierno no fue preparado para los hombres, sino para Satanás y sus ángeles. Esto nos muestra que el deseo de Dios es que todos los hombres sean salvos; sin embargo, debemos recordar la enseñanza bíblica de que Dios no anula la responsabilidad del pecador. Dios quiere que todos los hombres sean salvos, pero ya que muchos rechazan la gracia de Dios, entonces Dios enfoca su mirada en los que sí responden por la fe a la gracia de Dios. Es en este último sentido que Dios elige a unos para salvación y a otros para condenación. Este es el sentido que tiene la palabra "presciencia" del griego "prognosin" que se traduce: "conocimiento anticipado". De manera, pues, que Dios el Padre elige al pecador para salvación.
- Dios el Espíritu Santo santifica. (v. 2b)
En el Nuevo Testamento la palabra "santificar" tiene varios sentidos, pero aquí tiene el sentido de que el Espíritu Santo nos sacó del ambiente corrupto en que vivíamos y nos apartó para uso exclusivo de Dios. La Biblia dice que hoy ya no somos del mundo, sino de Dios; ahora somos instrumentos santos para honra de nuestro Dios. En el Antiguo Testamento Dios le ordenó a Moisés que hiciera muchos muebles y utensilios para el culto en el tabernáculo de reunión y todos esos objetos eran ungidos con aceite para que sirvieran exclusivamente en el santuario de Dios; todos esos objetos estaban santificados. En la enseñanza del apóstol Pablo aprendemos que Dios el Espíritu Santo tiene el ministerio de sacar a los hombres y mujeres del fango de pecado y dedicarlos para el servicio exclusivo de Dios. Cuando yo no era cristiano utilizaba mi ser, mis miembros corporales para servirle al pecado, pero hoy que soy cristiano, santificado por el Espíritu Santo, mi ser está al servicio de mi Señor Jesucristo.
- Dios el Hijo nos redime con su preciosa sangre. (v. 2c)
El apóstol Pedro dice en el Capítulo 1: 18,19 "sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación".
Resumiendo el versículo 2 aprendemos que la salvación es obra del trino Dios: Dios el Padre elige, Dios el Hijo redime y Dios el Espíritu Santo santifica. De manera que la salvación del pecador es obra exclusiva y perfecta del Dios trino.
II. La salvación del trino dios incluye la regeneración. (v. 3)
Cuando un pecador se arrepiente de sus pecados y pone toda su confianza en el Señor Jesucristo, entonces Dios el Espíritu Santo lo regenera. La palabra "regeneración" es la traducción del término griego "palingenesia" que se compone de "palin" "otra vez" y "génesis" "nacimiento". De manera que el término "regeneración" significa "nacer otra vez". En San Juan capítulo 3 Nicodemo preguntó sobre cómo un hombre puede nacer otra vez. Jesús dice que el nuevo nacimiento espiritual es obra de Dios y la única responsabilidad del ser humano es creer en el Señor Jesucristo.
Sin regeneración el hombre puede ser religioso, pero no regenerado, no tiene la experiencia de comulgar con el Dios vivo y verdadero. En el mundo hay muchas religiones y muchos religiosos, pero pocos los regenerados, porque sólo a través de la fe en el Señor Jesucristo, es que el Espíritu Santo regenera al creyente.
III. La salvación del trino dios trae otras bendiciones. (vs. 4,5)
- San Pedro enseña que en Cristo el creyente tiene: Una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible. (v.4 a)
- Esta herencia esta en los cielos. (v. 4b)
- Esta salvación es segura. (v. 5)
En el año 97, el país de El Salvador fue visitado por un numeroso grupo de misioneras de la secta Moon.; estas personas visitaban casa por casa para prometer a las personas la bendición del líder de la secta. Otra secta que recientemente ha llegado de Brasil promete bendiciones a cambio de dinero. ¡Las personas que pagan reciben botellas de agua de rosas y pedazos de tela, dis que benditas!. Pero nosotros los creyentes en Jesucristo no necesitamos bendiciones ni de milagreros, ni de santos, ni de brujos, ni de nadie, porque la Biblia enseña que hemos sido bendecidos con toda bendición en los lugares celestiales en Cristo (Efesios 1:3) ¡Aleluya!. ¡Nadie puede robarnos la herencia reservada en los cielos para nosotros!
IV. La salvación del trino dios nos trae gozo (vs. 6,7)
V. La salvación del Trino Dios nos trae convicción. (vs. 8,9)
- Amamos al señor sin haberlo visto. (v. 8a)
- Nos gozamos con alegría gloriosa. (v. 8b)
- Nuestra salvación es segura. (v. 9)
Conclusión:
Alabado sea nuestro bendito Dios que obró eterna salvación para todos los creyentes en el Señor Jesucristo. ¡Amén!. Dios el Padre nos elige, Dios el Hijo nos redime con su sangre, y Dios el Espíritu Santo nos santifica. ¡Alabado sea el trino Dios! Visitas: 16728
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I Pedro 1:2-9 2 elegidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas.
3 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,
4 para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros,
5 que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero.
6 En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas,
7 para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo,
8 a quien amáis sin haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora no lo vealegrinefable y glorioso;
9 obteniendo el fin de vuestra fe, que es la salvación de vuestras almas.
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